Si quieres que algo sea diferente en tu vida, entonces debes hacer cambios. El cambio se inicia en nuestro interior, y luego se manifiesta exteriormente. Tienes que cambiarte a ti mismo y luego hacer lo que te corresponda para conseguir que el mundo que te rodea se ajuste a tus cambios internos.
Para que se produzca un cambio de conducta, actitud o comportamiento deben darse estos requisitos:
1.Debes querer hacer el cambio
2.Debes saber cómo hacer el cambio
3.Debes tener la oportunidad de hacer el cambio
4.Debes estar dispuesto a hacer el cambio
5.Debes tener la voluntad para hacer lo que sea preciso para que el cambio se produzca.
Los puntos 1 y 5 aluden a la motivación. ¿Cuán motivado estás para hacer el cambio? Si no te va bien en tu relación, la primera pregunta que te puedes plantear es: “¿De verdad quiero esta relación?”(punto 1). Si la respuesta es afirmativa, entonces la siguiente pregunta sería: “¿Estoy dispuesto a hacer lo necesario para que esta relación funcione?” (punto 5). Si no respondes que sí a ambas preguntas, entonces los retos que te plantea tu relación pueden tener que ver con la motivación.
El punto 2 tiene que ver con el conocimiento. Si tienes dificultades para ganar suficiente dinero, podrías preguntarte lo siguiente: “¿Si alguien me pusiera una pistola en la cabeza y me dijera que tengo que ganar suficiente dinero, sería capaz de hacerlo?”. Si la respuesta es afirmativa, entonces el impedimento está relacionado con la motivación o disposición, pero si la respuesta es no, entonces el obstáculo tiene que ver con el conocimiento (el cómo).
El punto 3 se refiere a las circunstancias que son difíciles de controlar y que pueden controlarse más de lo que crees. Si quieres ser presidente de los Estados Unidos y eres ciudadano francés, las leyes estadounidenses te prohíben que seas presidente. Esta sería una limitación de oportunidad. Este requisito impide que te conviertas en presidente de los Estados Unidos y, como consecuencia, deberás limitarte al papel de secretario de Estado, el puesto que ocupó Henry Kissinger, de origen alemán. Como consejero de política exterior de cuatro presidentes, fue una de las personas más influyentes en el gobierno de Estados Unidos durante muchos años.
Si quieres jugar al baloncesto pero mides sólo un metro y veinte y tienes una sola pierna, no reunirás los requisitos físicos razonables. También en este caso hablaríamos de una limitación de oportunidad.
El punto 4 hace referencia al sistema inconsciente de creencias y valores. Si quieres correr una milla en cuatro minutos, pero el sistema de creencias arraigado en ti establece que es físicamente imposible que lo consigas, entonces con toda probabilidad nunca serás capaz de hacerlo. Carecerás de la disposición para hacerlo. Si tenías intención de ganar más dinero, pero la única manera que conocías era atracar un banco, entonces tu sistema de valores te impedirá hacerlo. Una vez más, carecerás de la disposición para hacerlo con tu nivel presente de conocimientos.
Estos cinco puntos cobran importancia cuando empiezas a considerar qué es posible en tu vida. Si consideras los objetivos que puedes marcarte, como por ejemplo ganar más dinero, disfrutar de una relación satisfactoria o del triunfo profesional, descubrirás que si aún no has logrado esas cosas el problema casi siempre tiene que ver con uno de estos puntos.
Conoce tu objetivo
Aproximadamente el 70 por ciento de los solicitantes para un empleo no tienen respuesta a la pregunta: ¿Qué es lo que busca? Consideremos esto por un momento. La mayoría de la gente se toma muchas molestias para solicitar un empleo. Redactan su currículum, escriben cartas de presentación, se compran ropa nueva, preparan citas para las entrevistas y se toman tiempo de su trabajo para acudir a la entrevista. Sin embargo, después de tanto tiempo y esfuerzo, muchos ni siquiera saben expresar lo que buscan en un empleo.
La mayoría de la gente no sabe lo que quiere. De hecho, muchas personas pasan toda su vida sin preguntarse jamás a sí mismas qué es lo que quieren en la vida. De los pocos que se plantean esta pregunta, muchos nunca dan con una respuesta clara. De la escasa minoría que tiene una respuesta, sólo unos pocos, los menos, manifiestan sus respuestas en términos que permitan alcanzar sus objetivos.
Muchas personas no consiguen sus objetivos en la vida porque no son conscientes de lo que en realidad quieren. Es como si un día se despertaran sorprendidos de lo viejos que son y se preguntaran por qué su vida es como es. A muchos nunca se les ocurre pensar que se han esforzado para llegar exactamente a donde se encuentran, sin siquiera haber tenido idea de adónde querían llegar.
Cuantas veces hemos escuchado con frecuencia esta frase:
“Si no estás seguro de adónde quieres ir, ahí es donde vas a acabar”.
¿Conoces alguien que se puede beneficiar con esta información? Comparte.
Contáctanos:
www.integrandoequipos.com
victor@integrandoequipos.com
Muy interesante, me gustaría recibir información al respecto.
Muchas gracias por tu comentario, con gusto te podemos compartir información al correo que nos proporcionaste.
Saludos
Hola Ramiro
con gusto te podemos enviar información a tu correo electrónico. Puedes verificar si te llego?