Los diferenciadores en los equipos de trabajo son las características que distinguen a la empresa de sus competidores, es típico que las empresas hagan competencia de precios.
La gente productiva invierte su energía, no su tiempo: En ocasiones decidimos invertir gran parte de nuestro tiempo en situaciones que lo único que consumen es nuestra energía y no nos permiten ser productivos, por el contrario, pareciera que nos obligan a comprometernos con más tareas y actividades. Decidir en qué invertimos nuestra energía es crucial para ser productivos durante nuestro día a día.
La gente productiva piensa en optimizar y hacer las cosas mejor: Establecer lo que es prioritario en nuestro día es indispensable para poder manejar nuestro tiempo de mejor manera y obtener mejores resultados. En lugar de seguir haciendo lo mismo esperando resultados distintos, busca la manera de optimizar tus procesos y tareas. Dedica unas horas al día incluso un día entero a revisar de qué forma algunas cosas podrían hacerse de mejor manera, más eficientes y más rápido. A veces tan solo unos pequeños cambios en nuestra rutina pueden hacer la gran diferencia. Lo importante no es qué tan rápido “apagas el fuego” si no las “estrategias” que estás implementando para reaccionar más oportunamente y tener tiempo para hacer otras cosas.
La gente productiva aprende a través de la reflexión y la evaluación: ¿Qué aprendizajes tuve de esta situación? ¿Qué salió muy bien y qué podría haber salido mejor? ¿Qué puedo aprender de los fracasos que tuvimos? Reflexionar y evaluar las situaciones que vivimos día con día nos permite tener más experiencia para futuras ocasiones, de manera que la próxima vez podremos hacerlo mucho mejor.
La gente productiva centra su atención en el logro de sus metas: Con tanta información y ante tanto “ruido” mental, tendemos a dispersar nuestros intereses, metas, objetivos, sueños y reaccionamos de acuerdo a lo que se va presentando. Esto no significa que esté mal el querer “comerse el mundo” y hacer de todo un poco, sin embargo si queremos dar resultados debemos de centrar nuestros esfuerzos en los objetivos que queremos lograr y focalizar nuestra atención a lo que hemos decidido que es importante. Quizá debas aprender a decir que “no” a varias opciones que se presentan en tu camino con tal de lograr el “sí” en tus metas. La gente poco productiva habla del poco tiempo que tiene, la gente productiva sabe que el tiempo es para lo que verdaderamente es importante. Como decía Drucker: “ Los resultados se obtienen al explotar las oportunidades, no al resolver los problemas”.
La gente productiva se mide por sus resultados no por sus palabras: Existen en inglés una frase que dice “walk the talk” que podría traducirse como “practica lo que predicas” o la importancia de predicar con el ejemplo. Puedes argumentar lo muy ocupado que has estado durante el día, pero realmente se te medirá por los resultados de lo que lograste durante ese tiempo. Serás productivo el día que tu tiempo esté dando resultados y no únicamente gastando tus horas en actividades que no producen ningún valor. Por ejemplo: puedes tener muchas reuniones y muchas juntas planeando lo qué se va a hacer, pero si no estás ejecutando y haciendo lo que se habla entonces evidentemente no estás obteniendo ningún resultado y lo único que estás haciendo es perder el tiempo. No hables de cambios, sé el cambio.
Peter Drucker decía “No hay nada tan inútil como hacer con gran eficiencia algo que no debería haberse hecho nunca”; yo digo que debemos de decidir en que invertimos nuestra energía, más que nuestro tiempo; y dejemos atrás todo aquello que nos limita, consume y nos hace ser poco productivos en nuestro día a día.