El adecuado establecimiento, difusión, gestión y evaluación de metas es un proceso vital para la evolución y crecimiento de una organización. La dirección de la compañía debe crear y asignar unas metas individuales para cada uno de sus colaboradores y atarlas a unas metas estratégicas que engloben todos sus procesosy permitan utilizar la estrategia de negocio seleccionada por la organización para cumplir con sus objetivos esperados.
En el siguiente video nuestro CEO, Carlos Santana, explica detalladamente el proceso de Gestión de Metas en una empresa y las razones por las cuales es indispensable evaluar su cumplimiento.Establecer metas específicas, medibles, alcanzables, relevantes y con plazos específicos de entrega es el primer paso para motivar al talento humano de cualquier tipo de organización. El establecimiento y difusión de las metas permite a los colaboradores trabajar mejor, exigirse mucho más y crear estrategias para alcanzarlas en el tiempo y la forma adecuadas.
Los objetivos verdaderamente motivadores tienen que ir más de allá de simplemente cumplir con una tarea. Las metas deben apasionar al encargado de cumplirlas, deben centrarse en el sentido individual y grupal que implica el hecho de estar involucrado en un proyecto y deben hacer sentir a los colaboradores como parte imprescindible para que la empresa alcance el éxito.
En muchas ocasiones los jefes imponen metas a su equipo haciéndolas ver como una obligación y no como un reto que requiere de toda su capacidad para cumplirlo. La clave está en mostrarles a los colaboradores que cada consecución de una meta es algo realmente importante para ellos y representa vivir nuevas experiencias y adquirir mayor conocimiento, lo cual fortalece su carrera y optimiza su productividad.
Cualquier meta que sea eficaz e inspiradora debe tener una fecha límite. Si realmente se quiere lograr un objetivo, es necesario asignarle un plazo de tiempo razonable. Esto permite mantenerse enfocado en la meta y crear una estrategia adecuada para optimizar los recursos y el tiempo disponible para completar la tarea.
La fijación de plazos fijos tiene un gran impacto en el desempeño de las personas. No se trata de establecer periodos de tiempo irreales y que no permitan cumplir con las tareas pendientes, la clave está en tomar en cuenta las variables que inciden en el cumplimiento de la meta y asignar un tiempo razonable para cumplirla. Otro aspecto aconsejable es fijar los plazos en días y no en meses, decir 60 días y no 2 meses hace la diferencia.